sábado, 31 de enero de 2009

sexualidad equivalente

Recordando la conversación de esta madrugada con M.A. &  Di. en un bar de clandestinidad dudosa, hablabamos de la mala fama sexual de algunas nacionalidades y la fantástica popularidad de otras. Al respecto he llegado a la conclusión de que en general es lo mismo que sucede con las modelos de fotografía de modas:

Hay modelos muy buenas que simplemente les dices el concepto de lo que quieres y ellas llegan y Bum! Bang!! te dan unas poses maravillosas, resultando siempre unas fotografías espectaculares. Esto a nivel sexual sería lo que yo llamo magnus polvus. Alguien que simplemente es un nato conocedor del tema no solo de la teoria, si no también su práctica, y alguien a quién no tienes que decirle que hacer porque parece que la información ya la traen de fábrica.

Hay chicas que no son realmente muy buenas pero son astutas y con una buena dirección te dan lo que quieres, tu les dices: ponte de lado, levanta la cabeza, haz cara de mala, imagina que estas cenando con Brad Pitt… y finalmente la fotografía podría ser buenisima y hasta tener algun factor sorpresa. Esta interacción podría ser tan productiva como la primera y hasta lo podría superar si el contrincante se pone creativo. También hay que considerar que esta gente normalmente irá aprendiendo con la práctica y al final no serà necesario dirigirlos, por lo que podríamos luego pasarlos al bando del párrafo de arriba.
Pero hay otras, que simplemente no dan pie con bola. No son buenas por naturaleza y son incapaces de seguir dirección alguna, entonces quedan esas fotografías de moda donde no sabes si la chica representada realmente es ruda o simplemente tiene dolor de estomago. Esto sexualmente hablando es lo que yo llamaría la bula del malus polvus culmín. De esos hay que cuidarse porque si aparte creen tener algún conocimiento quiropráctico o tienen pasión por la lucha libre… nos podrían descalabrar el esqueleto en el intento del primer round.